Pasamos mucho tiempo evitando apreciar las cosas pequeñas; preocuparnos demasiado, quejarnos, chismear, comparar, desear, querer y esperar algo más grande en lugar de enfocarnos en todos los simples milagros que nos rodean a diario.

Lo que realmente necesitamos es un momento para contemplar y agradecer todo lo que tenemos a nuestro alrededor. 

Hasta las cosas más simples puede ser maravillosas. Porque estamos vivos, porque podemos observar, sentir y estar, porque tenemos alimento, un hogar, y hasta un aparato tecnológico por donde ahora estas leyendo esto, agradécelo, no todos tienen ese privilegio.

 Es que nos pasamos la vida quejándonos, buscando más, deseando alcanzar eso, o lograr aquello, pues eso precisamente, es lo que nos causa infelicidad, perseguir, buscar, esperar algo más, antes de apreciar todo lo que ya tienes ahora. 

Eres muy afortunadx, ¡vive cada segundo! 🤍